Los abuelos y los nietos

Con la sonrisa en los labios, quizás un poco de cansancio en su rostro, pero feliz.

Es feliz porque puede cuidar y disfrutar de sus nietos. Sus hijos trabajan, en estos tiempos y en todos es muy importante tener un trabajo.

El parque está lleno de abuelos cuidando sus nietos, buscando en verano la sombra y el frescor de los árboles, y sin perder de vista lo más grande que tienen, sangre de su sangre, la continuidad de la vida, ese bebé o niño vivaracho que cada día aprende algo, que nos llena de ternura y sensaciones vividas, que nunca te cansas de mirar, de reír sus gracias, sus avances y descubrimientos, que le contarás tantas cosas, canciones, cuentos, historias.

Lo estrecha en sus brazos, la brisa acaricia su rostro, quisiera detener el tiempo y disfrutar esos momentos maravillosos. Parece que fue ayer que estaba en el mismo lugar con sus hijos.

La vida es un soplo
hay que vivir intensamente
ver lo bueno de las personas y las cosas.

si… quiere ser positiva y feliz.

Pero a veces piensa en su amiga Isabel
que se quedo viuda y crio a sus tres hijos.
Que se dejo la piel limpiando casas hasta caer rendida para sacarlos
adelante. Que se sintio feliz cuando su hija Laura la llamo para que cuidara de sus dos nietos.

Tres años con la sonrisa en los labios, cansada pero feliz
con los huesos doloridos, pero feliz
Feliz de sentirse útil y querida.

Atrás quedo para ella nuestras tardes en el parque,
nuestras confidencias, el correr detrás de sus nietos
la brisa en el rostro, la mirada serena.

Isabel se rompió la cadera
los niños fueron a la guardería
ella está en una residencia
los hijos no pueden cuidarla
los nietos no la necesitan.
La sacan al patio, la brisa en el rostro
pero la mirada perdida, perdida.

Dios mio que injusta, que injusta es la vida.

Miro a mis nietos, sonrisa abierta, mirada clara, amanecer de la vida.
Hoy soy feliz
Sí voy a ser positiva y feliz.

Mañana…
Mañana será lo que Dios quiera que sea.
Mis nietos corren, corren y juegan
y todo pasa y todo llega.