La importancia del sueño en los niños
abril 1, 2010
Muchos psicólogos, pediatras y especialistas están de acuerdo en que la salud y el crecimiento de los niños se hallan estrechamente ligados a sus ritmos biológicos.
Una desincronización del reloj biológico, que gobierna su sistema nervioso, y que no le permite descansar el tiempo necesario puede provocarle numerosos problemas de cansancio, falta de rendimiento intelectual e incluso retraso en el crecimiento.
Fases o ritmos de sueño
Se considera que el sueño presenta dos formas: el sueño lento (no REM) y el sueño con movimientos oculares rápidos (REM).
Al acostar al niño, sus músculos se relajan y disminuye su percepción del entorno. A partir de ahí, comienza el período de sueño lento, que consta de cuatro fases:
- Fase 1: Fase ligera en la que los músculos se relajan y la respiración y el ritmo cardiaco se ralentizan.
- Fase 2 y 3: El nivel de conciencia va disminuyendo. Las funciones corporales se enlentecen y desciende la temperatura corporal y la tensión arterial.
- Fase 4: Es el período de sueño más profundo. Es el estado de inconsciencia mayor donde es más difícil despertar a la persona que duerme. Durante esta fase aumenta la producción de la hormona de crecimiento (HC).
Después de la fase 4, se entra en el período de sueño REM o período de movimientos rápidos de los ojos fácilmente observables. Es la fase en la que se producen los sueños. Suele durar unos diez o quince minutos, transcurridos los cuales vuelve a iniciarse un ciclo completo de sueño con todas sus fases.
Esta demostrado que la falta de sueño puede dar origen a comportamientos de aislamiento, angustia y actitudes agresivas en los niños. Además, al dormir el organismo aumenta la producción de sustancias que regulan y aumentan la respiración inmunitaria.
Medidas naturales que pueden facilitar el sueño reparador en los niños:
- Ejercicio físico moderado.
- Ejercicios de relajación y respiración (por ejemplo, el yoga adaptado a los niños).
- Cenar de forma moderada. Un vaso de leche antes de acostarle, puede contribuir a conciliar su sueño, ya que contiene triptófano. Otros alimentos ricos en este aminiácido son los plátanos, el pavo y el queso.
– Ciertas infusiones también pueden ayudar a la conciliación del sueño como la tila, el azahar, la melisa, la hierba luisa, la manzanilla y la menta.
mi niña tiene 6 años y si es sueño lento pero hace una semana es todos la noche se levanta y empiensa a hablar que no la entiendo le hablo y esta viendo por todas partes y no me hace caso y despues de un minuto le hablo y me hace caso y e durme se normal?