Recuperar el valor de los juegos tradicionales
marzo 13, 2012
Una buena alternativa para hacer frente a la creciente presión del entretenimiento globalizado de consumo es recuperar de nuestra infancia aquellos divertidos juegos que simplemente requieren de nuestra presencia física pero que poseen múltiples beneficios para el desarrollo psicofísico de los pequeños.
Muchos de estos juegos son colectivos, haciéndolos muy convenientes para los niños de ahora, y en especial, para aquellos que pasan horas jugando a los videojuegos. Al contrario de los juegos virtuales, en los cuales muchos de ellos suelen ser violentos y todo está (virtualmente) permitido, los juegos tradicionales representan un interesante medio de socialización, debido a que se rigen por reglas que cada participante debe asumir para poder jugar.
Además, estos juegos implican una forma activa de educación para la convivencia, donde la pertenencia al grupo y el estímulo del desarrollo de la capacidad de negociación y adaptación están por encima del desarrollo del valor de la competencia. La práctica de estos juegos tradicionales integran mente, cuerpo y emociones.
Algunos juegos populares
- Correr y esconderse: Desarrolla la percepción del propio cuerpo, la velocidad de reacción, la agilidad y el desarrollo de estrategia, el conocimiento del espacio, el respeto por el trabajo en equipo y el respeto por las normas. Ej: el escondite, polis y cacos, escondite inglés, etc.
- Correr y pillar: Desarrolla la percepción del espacio temporal, la resistencia y la velocidad de reacción. A su vez, fomenta el espíritu de equipo y el respeto por las normas. Ej: Pañuelo, Rescate, Cuatro esquinitas.
- Correr y pillar canciones: Desarrolla la coordinación dinámica general, la agilidad, la fuerza y el equilibro. A su vez, motiva la autonomía personal y la socialización. Ej: Ratón que te pilla el gato, Abuelita qué hora es, etc.
- Lanzar y evitar pelotas corriendo: Desarrolla la capacidad de atención, de reacción, la velocidad y la agilidad. Además, fomenta el espíritu de equipo y el respeto por las normas. Ej: Naciones, balón prisionero, etc.
- La rayuela: Desarrolla la precisión, el cálculo espacial, el equilibrio, la estrategia, y la coordinación entre ojos y manos. A su vez, fomenta el respeto por las normas.
- La gallinita ciega: Desarrolla el sentido de la orientación, la percepción corporal y sensorial, la capacidad auditiva, táctil y quiestética; la atención, la concentración, la velocidad de reacción. Además, incentiva a practicar la confianza en los demás.