Cuando el bebé se encuentra en “posición de nalgas”
abril 25, 2012
En la mayoría de los casos, los bebés nacen con la cabeza hacia abajo y se acomodan en una posición que facilita el momento del parto. Aunque alrededor de un 3% de los nacimientos, los pequeños se colocan con su cabeza hacia arriba y las nalgas hacia abajo.
Esta posición “sentada” es denominada “presentación de nalgas o presentación podálica”, en la cual la cabeza queda situada en la parte superior del útero y las nalgas hacia abajo, posicionadas en la pelvis, con las piernas cruzadas.
El momento del parto depende de la posición que haya adoptado el niño en el vientre materno. En términos generales, el bebé adopta una posición final durante el séptimo mes de gestación, en el cual se da vuelta, dejando su cabeza hacia abajo, llenando mejor el espacio de la placenta.
Casos posibles en los que el bebé no se da vuelta:
- Bebés prematuros que no tuvieron tiempo de darse la vuelta.
- Bebés que extienden las piernas, tienen dificultades para moverse y ubicarse en posición de nalgas después.
- Bebés que tienen demasiado líquido amniótico o no tienen suficiente.
- El útero es demasiado estrecho o presenta anomalías.
- Embarazo de gemelos, en el cual los fetos no pueden moverse bien.
La posición de nalgas modifica la dilatación ya que, a diferencia del cráneo, éstas son más blandas y ejercen menor presión sobre el cuello del útero. De todas formas, es posible que el bebé nazca por vía natural en aquellos casos donde el niño no es muy grande y la pelvis es lo suficientemente ancha. Puede que el parto se prolongue y sea necesario aplicar anestesia peridural.
Es aconsejable realizar una cesárea, si el bebé no está completamente de nalgas, la cual deberá programarse entre las semanas 39 y 40 de amenorrea.
Existen algunas técnicas que puede realizar el ginecólogo para intentar modificar la posición de los bebés que vienen de nalgas. Entre finales del octavo mes y principios del noveno, el especialista puede incitar, a partir de presiones sobre el vientre, para que el bebé se de la vuelta.
Dicho procedimiento dura alrededor de 2 ½ hs y tiene un 50% de probabilidad de éxito. Habrá que considerar que esta técnica puede llegar a provocar un principio de desprendimiento de la placenta o un trabajo prematuro.