Dolores después de tratamientos dentarios y operaciones
septiembre 20, 2012
Después de realizar tratamientos odontológicos, pueden surgir algunos dolores acompañados de inflamación o de hematomas. Generalmente esto ocurre al sufrir la extracción de una muela del juicio o de un diente, como también a causa de una intervención en las encías. El uso de aparatos y nuevas prótesis también pueden provocar dolores.
Causas posibles
La alveolitis: es una complicación generada por la extracción de una pieza dentaria. El alveólo, que es el hueco que queda en el hueso tras una extracción, tiende a inflamarse y puede infectarse. El dolor que provoca es poco controlable con analgésicos y si no se trata de inmediato puede durar 2 semanas. Consultar rápidamente al dentista y mantener la higiene dental en óptimas condiciones.
El blanqueamiento dental: es un tratamiento muy de moda que se realiza para aclarar los dientes y su uso es definitivo. Su aplicación consiste en aplicar un gel durante 10 noches en la superficie de los dientes, con ayuda de bandas de plástico flexibles adaptadas a las arcas dentarias, con posibilidades de notar sensibilidad al frío y al calor mientras el tratamiento dure, desapareciendo espontáneamente. Si aparece esta molestia aplicar una noche sí y otra no.
La colocación de prótesis o aparatos removibles: pueden provocar heridas, así como cortaduras o erosiones semejantes a aftas. Para tratar estas molestias, probar con enjuagues bucales o aplicar una pomada anestésica. Recurrir al especialista para retocar la prótesis o el aparato.
Una caries: al ser tratada, puede permanecer sensible al frío y al calor durante los días subsiguientes. Evitar el contacto con lo dulce, el calor y el frio. Si hubiera dolor, tomar paracetamol y recurrir al dentista. En el caso de haber dolor fuerte y constante, será necesario desvitalizar, practicando una endodoncia (sustraer el nervio).
Las extracciones: una vez que la anestesia se haya disipado, el dolor aparecerá, pues los tejidos gingivales y óseos fueron lesionados con la sustracción dentaria. Si el dentista retira parte del hueso, el dolor aumentará más, produciendo posiblemente un edema y tal vez un moretón.
Es recomendable en estos casos tomar analgésicos antes que se termine el efecto de la anestesia y repetir antes de ir a dormir. Aplicar frío durante ¼ de hora en reiteradas ocasiones para aminorar la hinchazón y el dolor. Consumir alimentos disueltos y en lo posible todos fríos durante el primer día.